XXIX oLIMPÍADAS bEIJING 2008

El bronce que vale oro

Espínola y Lange ganaron el bronce en Qingdao, pero valió como un primer puesto a partir de las desventajas a las que se sobrepusieron: días antes del torneo les chocaron el barco y tuvieron que correr con el muletto, que hasta se les volcó... MARTIEN EULA | meula@ole.com.ar




Camau con la bandera, Santi y el gesto: ¡OK, Argentina!


Los molinos de viento parece que en cualquier momento levantan vuelo...

Por el trabajo, el profesionalismo, la organización, la seriedad, la idea en equipo, la constancia. Por superar obstáculos, no quemar etapas, saber qué puede dar uno y qué el otro y no superponerse. Por no poner excusas, bancarse que te choquen tu embarcación desarrollada durante cuatro años a días de la primera regata, competir con el barco de repuesto y reponerse de días aciagos, que incluyeron un vuelco del catamarán. Por darle velocidad a la embarcación en días sin un soplido de viento o domar esa misma embarcación con el ventarrón y la lluvia de ayer. Por el esfuerzo para ir casi de espaldas al agua. Por levantar la bandera argentina apenas cruzada la línea final. Por emocionarse en ese mismo momento aunque no hayan sido primeros. Por el respeto que se ganaron de los rivales. Por todo eso, Carlos Espínola y Santiago Lange valen oro aunque mojados de pies a cabeza luzcan el bronce en la ceremonia de premiación en la marina de Qingdao. Por la cuarta medalla de Camau, récord para el país. Por la sabiduría de Santiago, que si se midiera también podría ser récord.

En este caso, el trabajo no es cantinela. Son ocho años y dos podios olímpicos. Es pura emoción. Mariano Galarza, el coordinador y mano derecha del equipo, se mete al agua del mar Amarillo y no le importa mojarse las zapatillas. Se abraza durante un minuto con Lange, en uno de esos abrazos que no se terminan nunca. Daniel Espina, el profesor de yoga, repite la imagen con Camau. Todos empapados, felices, realizados.

Es obvio que el objetivo era el oro y lo habían dicho siempre. Pero los españoles Echavarri y Paz Blanco se adaptaron mejor que nadie a las desestabilizantes condiciones de esta cancha de marina, y también emocionaron con el festejo con sus colaboradores: todos vestidos terminaron en el agua. La dupla argentina fue sexta en la Carrera de Medalla, la última regata que da puntaje doble, y terminó a 12 unidades de los ganadores y a seis de Australia, que se llevó la plata.

Precisamente plata en Atlanta y Sydney en windsurf, Espínola se unió a Lange en Tornado en el 2000 y suman dos bronces consecutivos. En un país fundamentalista del éxito y del que si no sos primero no servís, puede ser la nada. Pero es todo. Estos dos tipos, y su equipo, alquilaron casa en Qingdao para conocer el terreno, adelgazaron varios kilos (ocho entre los dos) para estar más livianos por la falta de viento, planificaron todo hasta el último detalle y se mantienen en la elite mundial. Sin los recursos de los europeos, eso sí, pero con más apoyo que otros deportistas argentinos.

Lange cumple 47 años el 22 de septiembre y Espínola, 37 el 5 de octubre. Son grandes, pero arriba de la embarcación y en el podio disfrutan como dos chicos con juguete nuevo. Ese barco sobre el que tanto laburo le pusieron, y esas medallas que se ganaron con esfuerzo son su mejor juguete. Un juguete que vale oro y que ni el viento más fuerte se los va a sacar.

Las chicas de bronce que brillan como el oro


Tras la dura caída en semis, Las Leonas demostraron mucho corazón y se quedaron con la medalla de bronce al derrotar a Alemania por 3-1, en el partido por el tercer puesto. Burkart, Rebecchi y Barrionuevo anotaron para el equipo de Minadeo, que logró la hazaña de subirse al podio olímpico por tercera vez consecutiva, cifra récord para un deporte de conjunto de nuestro país.



ORGULLO. Las Leonas, en el podio tras recibir la medalla de bronce. (AP)


Beijing 2008 encontró a Las Leonas en su hábitat natural: el podio. Argentina venció a Alemania por 3-1 y se quedó con la medalla de bronce. Es la tercera presea consecutiva (plata en Sydney 2000, bronce en Atenas 2004) para un equipo inolvidable, que hace de los valores olímpicos un culto, que juega cada partido como una final.

Las ganas de Argentina se pusieron de manifiesto desde el primer minuto. El equipo se plantó decididamente en campo rival y presionó hasta provocar equivocaciones en la última línea alemana. A los 11 minutos, Las Leonas ya estaban gritando el primer gol, a partir de su tercer córner corto. Hubo una desinteligencia en el frenado de la bocha, pero el juego se abrió hacia la izquierda y Claudia Burkart cruzó un remate que pasó por debajo de la arquera Reynolds para convertirse en el 1 a 0.

No se quedaron las chicas argentinas y un rato más tarde estiraron la diferencia. Las defensoras del conjunto europeo perdieron la bocha y Alejandra Gulla quedó de cara al arco alemán. La delantera argentina no definió bien, pero Carla Rebecchi estuvo atenta para tomar el rebote y llegar al gol. La diferencia entre un equipo y otro era muy grande, tanto que el 2-0 con el que se cerró el primer tiempo tuvo gusto a poco para Las Leonas.

Alemania reaccionó en el inicio de la segunda parte, aprovechando un bajón físico de las argentinas. Aún no se habían jugado 10 minutos cuando vino el descuento, con un tremendo remate cruzado de Anke Kühn. Los movimientos ofensivos de las alemanas desnudaban una verdad a gritos: al equipo argentino le cuesta mucho jugar sin la bocha.

Aguantar el resultado durante 25 minutos jugando a bajo nivel parecía una misión casi imposible, sobre todo ante un rival de tanta jerarquía. Quedaba la esperanza de aumentar en un contraataque, como el que comandó Rebecchi cuando promediaba la etapa. Lamentablemente, falló en la definición y dejó pasar una gran chance de resolver la historia.

Defendieron Las Leonas. Sin aire pero con orgullo. Sin piernas pero con corazón. La arquera Vukojicic se hizo enorme; la capitana Aicega marcó el camino con el timing de sus mejores tiempos; la inigualable Aymar aguantó la bocha y jugó con el reloj. Hasta que llegó el tercer gol, el de la tranquilidad. Después de tanto sufrir por la poca eficacia en córner cortos, esta mañana el fijo pagó. Se le dio a Noel Barrionuevo, con una arrastrada que venció a Reynolds y selló el 3 a 1. Medalla en el bolsillo y a festejar con todo un triunfo muy luchado.

¿Qué mejor manera de explicar el espíritu de Las Leonas que verlas unidas en un abrazo tras asegurarse un nuevo podio olímpico? Fue inmenso el dolor que sintieron tras la derrota con Holanda en semifinales. Tan grande como el orgullo con el que hoy salieron a jugar el partido por el tercer puesto. Así se pelea por una medalla.

Vinieron a buscar el oro, se llevaron el bronce. De paso, se quedaron con un pedazo grande de la historia de nuestro deporte. En un país en el que los logros a nivel internacional no abundan, hay un equipo que ganó tres medallas olímpicas consecutivas. No puede ser casualidad. No es casualidad.

¡Qué aguante!

El etíope Kenenisa Bekele ganó la medalla de oro en los 5000 metros, tras haberse adjudicado los 10000 metros. Además, con un tiempo de 12 minutos, 57 segundos y 82 centésimas marcó un nuevo récord olímpico. Este doblete en las pruebas de fondo no se daba desde el logro de su compatriota Miruts Yifter en Moscú 1980.



YO QUIERO A MI BANDERA. El etíope Bekele tras conseguir el oro en los 5000 metros. (AP)


El etíope Kenenisa Bekele ganó este sábado la medalla de oro de 5000 metros de los Juegos Olímpicos de Beijing, con lo que logró el doblete en las pruebas de fondo, ya que antes se había quedado con el título de 10.000. Además, el africano marcó un nuevo récord olímpico con la marca de 12 minutos, 57 segundos y 82 centésimas.

Detrás de Bekele llegaron los kenianos Eliud Kipchoge (13:02.80), medalla de oro en el Mundial-2003 y plata en el de 2007, y Edwin Soi (13:06.22). De este modo, el etíope se sacó la espina de la decepción de Atenas, donde ganó la prueba de 10.000 metros y sólo pudo ser segundo en 5.000, superado por el marroquí Hicham El Gerrouj.

Este es el primer doblete de la distancia en categoría masculina desde que lo lograra el también etíope Miruts Yifter en los Juegos de Moscú en 1980.

Di campeón

La medalla de oro es argentina otra vez. Con una definición descomunal de Di María, la gran revelación del equipo, nos vengamos de Nigeria. Ni los 32° pararon a la Selección.PABLO CHIAPPETTA | pchiappetta@ole.com.ar



Agüero abraza a Di María. Lo hace por todos nosotros.


Más o menos, más o menos. La manito de Angel Di María ilustraba ese gesto técnico descomunal, de potrero genuino, una denominación de origen que vale un oro, el segundo consecutivo para la historia del fútbol argentino, y consuma la venganza de la final perdida en Atlanta 96. El pibe se filtró entre dos camisetas verdes, recibió un pase de Messi maravilloso también y levantó la tierra con una picada de pelota que sin dudas habrá que hacerle un lugar en el museo de los lujos. Sí, sí, señores, Di Campeones.

Pero hubo que transpirar para que el pecho recibiera la medalla. Al que se le ocurrió jugar a las 12 del mediodía hay que darle un premio porque es un genio: ¿cómo hizo para convencer a todo el mundo de ponerse a patear la pelota con semejante calor? El termómetro marcaba 32°, pero nadie le creyó. Ahí abajo, en el césped y a pleno sol, hacía mucho más. Con este clima, la intención del toqueteo con movilidad duró un suspiro. Enseguida se notó que Argentina no podría mantener el ritmo, que era vital para poder quebrar la sólida y veloz defensa de Nigeria. Y se fue instalando por la fuerza un ritmo cansino, monocorde, en el que la jugada empezaba y terminaba a la misma velocidad, salvo cuando entraba en acción Di María, el único con velocidad de sexta que complicó cada vez que rompió por izquierda. Messi arrancaba, pero en tres, cuatro pasos, se le acababa el combustible y así su tremendo pique corto perdía eficacia. Argentina fue disminuyendo poder sobre el balón, porque la imprecisión se hizo carne y porque Nigeria fue imponiendo su familiaridad para jugar con el calor. A los africanos les faltó, sí, poder de fuego, y cierta decisión. Llegó por primera vez con un tiro de Isaac que contuvo Romerito. Y recién reaccionó cuando estaba abajo en el marcador. Argentina no tenía soluciones en lo colectivo, y las terminó encontrando en el tremendo poder de su talento individual. Messi levantó después del descanso. Se vistió de Riquelme para dar ese pase al corazón de los nigerianos, y Di María, la gran revelación de los Juegos, hizo la diferencia. Seis jugados, seis ganados, la segunda medalla y otro equipo en la historia.

La otra medalla

El 3 a 0 a Brasil, un triunfo claro, contundente y que dejó al rival desencajado, quedará grabado en la memoria. El oro lo confirmó...




Agüero se lo dedicó a su futuro hijo y el abuelo lloró...


Por suerte, nunca se podrá saber qué hubiese pasado si Argentina no lograba el oro. Riquelme, tal vez para motivar(se), había asegurado que si eso sucedía nadie se acordaría del 3 a 0 a Brasil. Ahora, con los laureles en el cuello, es posible cambiar la pregunta: ¿se recordará más la final que confirmó la medalla que más brilla o ese triunfo tan claro, contundente, con el rival desencajado al cierre de la semi? ¿O a esta altura las dos alegrías resultan indisolubles? Lo bueno es que no hay necesidad de elegir: la Selección se quedó con todo.

Principal referencia rival de Argentina, el cruce con Brasil comenzó a palpitarse una vez superada la fase de grupos. Estaba la posibilidad, y se confirmó. Para ser campeón hay que ganarles a todos, ¿no? Y un título después de un 3-0 a ellos, mejor. De hecho, en Atenas 2004, el oro se celebró por varios motivos (buen fútbol, el arco invicto, la primera medalla dorada de la historia), aunque la ausencia de Brasil hizo que le faltara ese no sé qué... Ahora fue completo.

Si hasta tuvo el plus de la explosión de Agüero, el "pecho de Dios", con el condimento emocional: el orgullo del futuro abuelo, que festejó el segundo gol hasta las lágrimas, por su pasión por la Selección y también por sentimientos no vivenciados hasta hace poco. "Hacía rato que no veía a un Brasil tan mezquino y defensivo", aseguró Maradona luego del festejo, más relajado y no menos picante.

¿La medalla de bronce habrá funcionado como un consuelo? ¿Le evitará la renuncia a Dunga, al borde de firmarla a partir del 0-3? Fue un golpe como hacía mucho no le embocaba Argentina, un triunfo que será recordado durante mucho tiempo. Más allá de la segunda medalla de oro. Sí, Riquelme, mejor todavía con el título concretado.

hipnos escribió:

Crow para tres medallitas locas que llevan normal que le den tanta coba

CROW escribió:

hipnos escribió:

Crow para tres medallitas locas que llevan normal que le den tanta coba

:eing:

Oro para la mexicana María Espinoza		<table cellSpacing=0 cellPadding=0 width=267 border=0><tr><td colSpan=2></TD></TR> <tr><td align=left colSpan=2></TD></TR> <tr><td class=bloquehome_relacionadas width=11></TD> <td class=bloquehome_relacionadas width=256></TD></TR> <tr><td vAlign=top align=left colSpan=2></TD></TR> <tr><td></TD> <td><TABLE cellSpacing=0 cellPadding=0 width=246 border=0> </TABLE></TD></TR> <tr><td colSpan=2 height=11></TD></TR> <tr><td bgColor=#ff6600></TD> <td class=treb14 bgColor=#ff6600>NOTAS RELACIONADAS</TD></TR> <tr vAlign=top align=left><td colSpan=2 height=6></TD></TR> <tr><td colSpan=2 height=13></TD></TR> <tr><td class=bloquehome_medallero></TD> <td class=bloquehome_medallero>• María rescata a México • ¿Quién es María del Rosario Espinoza? • Asegura María Espinoza medalla para México en taekwondo • Es el momento por el que siempre luché: María Espinoza • Mentalidad de campeona da el oro </TD></TR> <tr><td class=bloquehome_medallero colSpan=2 height=6></TD></TR> <tr><td colSpan=2></TD></TR> <tr><td bgColor=#ffffff colSpan=2 height=12></TD></TR> <tr><td colSpan=2></TD></TR> <tr><td colSpan=2 height=12></TD></TR> <tr><td colSpan=2></TD></TR> <tr><td bgColor=#ffcc00></TD> <td class=treb14 bgColor=#ffcc00>MULTIMEDIA</TD></TR> <tr vAlign=top align=left><td colSpan=2 height=6></TD></TR> <tr><td colSpan=2 height=13></TD></TR> <tr><td class=bloquehome_medallero></TD> <td class=bloquehome_medallero>• Fotogalería : Gana oro María Espinoza </TD></TR></TABLE>
La taekwondoín mexicana derrota a la noruega Nina Solheim 3-1 y le da a nuestro país el segundo oro en Beijing
Redacción 23/08/08
7:02 Beijing.- 8:07 Con una pícara mordida a su medalla, María Espinoza inicia el camino hacia el vestuario. 8:02 María Espinoza recibe su presea y se entona el Himno Nacional Mexicano. 7:58 Da inicio la ceremonia de premiación. 7:56 María Espinoza está a punto de regresar al tatami del gimnasio de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Beijing, para recibir su medalla de oro. 7:22 Termina el combate y María se lleva el segundo oro para México en los Juegos de Beijing 2008 7:20 Se va María dos puntos adelante y la noruega ya tiene uno. Pero la mexicana se crece y suma una unidad más. La taekwondoín se duele de la rodilla. 7:17 María se muestra combativa, pero los jueces no le marcan sus impactos en el peto de la noruega. Termina el segundo round. Con la mexicana aún con la ventaja de un punto. 7:15 Consigue María su primer punto en el primer round antes de la culminación del primer minuto. Mantiene su estrategia de esperar a su rival la noruega Nina Solheim que hasta el momento le ha dado resultado. La mexicana enfrentará en la final a la noruega Nina Solheim, quien entre sus logros tiene un octavo sitio en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 y de igual manera bronce en el Campeonato Europeo. María del Rosario Espinoza está en la final y ahora todo depende de ella misma para escribir su propia historia y lo que suceda será más que bien logrado, pues ha dejado en el camino a la tunecina Khaoula Ben Hamza, a la sueca Karolina Kedzierska y luego a la propia británica Sarah Stevenson. Así simplemente María, está en la antesala de la gloria, de verse consagrada ante el imperio de Beijing y sus dinastías que la acompañaron para llegar a la final.

P.D. como dato adicional, ella es la primera atleta mexicana en cubrir el ciclo completo como dicen : Medalla de Oro en panamericanos, Campeona Mundial y Medalla de Oro en la Olimpiada.

Tarjeta roja

El taekwondista cubano Angel Valodia Matos fue suspendido de por vida por pegarle una patada al árbitro sueco Chakir Chelbat, quien lo había descalificado en la pelea por el bronce. El campeón olímpico en Sydney 2000 le ganaba 3-2 al kazajo Arman Chilmanov cuando recibió asistencia médica por una lesión en su pie derecho. Pero como tardó más de un minuto en recuperarse se le dio por perdido el combate.


PATADA PARA LA HISTORIA. Al cubano se le soltó la cadena cuando lo descalificaron. La Federación Internacional de Taekwondo decidió suspender también a su entrenador. (AP)

Vergonzoso e infantil. El taekwondista cubano Angel Valodia Matos agredió al árbitro Chakir Chelbat al ser descalificado en la pelea con el kazajo Arman Chilmanov por la medalla de bronce en la categoría hasta 80 kilos. Por tal reacción, la Federación Internacional de Taekwondo lo suspendió de por vida a él y a su entrenador, Leudis González.

¿Qué pasó? Cuando Valodia Matos ganaba 3-2 Matos sufrió una lesión en los dedos del pie derecho y los médicos subieron al tatami para atenderle. Pero cuando el cubano se levantó, el árbitro dio la pelea por concluida y señaló al kazajo como ganador, ya que había tardado más de un minuto en recuperarse –tal como establece el reglamento-.

Como si eso fuera poco, Valodia y González empezaron una discusión con el árbitro, al que acusaron de corrupto, y el campeón en Sydney 2000 también atacó al juez asistente. "A mí me ofrecieron dinero los kazajos, y estos árbitros estaban comprados", aseguró el entrenador. Un completo escándalo a un día del cierre de los Juegos Olímpicos de Beijing

Un bronce que vale oro


Argentina le ganó a Lituania por 87-75 y sumó la sexta medalla para la delegación nacional. Gracias a una enorme defensa y con Delfino (20 puntos), Scola (16) y Nocioni (14) como principales vías de gol, el equipo de Hernández volvió a subirse al podio olímpico. Manu, lesionado, fue el hincha número 1 desde el banco.
Los cuatro mejores equipos llegaron a las semifinales del básquetbol olímpico y será Lituania el rival argentino en la lucha por la medalla de bronce. Nada mejor que el sabor de la revancha para irse a casa con la mejor cara.

La Generación Dorada ya conoce en carne propia que el juego lituano lastima más de la cuenta cuando fluye a su ritmo. Por eso la clave del partido de esta madrugada argentina será atender cuestiones defensivas elementales para frenar a Lituania.

No pudo Argentina descifrar con criterio la forma de defender el juego de pick and roll lituano mostrado en el partido del debut olímpico. Petravicius y Javtokas llegaron a bandejas fáciles no por su envergadura física sino por el buen manejo de los tiempos por parte de Jasikevicius, el titiritero de este equipo, y de Kaukenas en el dos contra dos.

Además, Lituania sabe cómo castigar desde el perímetro y lo demuestra con jugadores de diferentes cualidades. Porque puede lograr triples a través del frío Siskauskas, del especialista Jasaitis y del alto Lavrinovic, constantemente saliendo de la zona pintada.

Será tiempo entonces de apelar a la soberbia defensa y a la concentración ofrecida ante Croacia, en su máximo expresión, y ante Grecia, en un partido que no se podía haber ganado sin esa presión defensiva.

En el ataque, teniendo en cuenta la casi segura ausencia de Emanuel Ginóbili, habrá apuesta al juego interior de Luis Scola, un grande entre los grandes con sus rápidos movimientos de piernas y brazos entre hombres más duros. También se apostará a la desfachatez de Delfino.

Y será necesaria la aparición del recambio en el momento justo. Como Paolo Quinteros y Leo y Juan Gutiérrez lo ofrecieron ayer ante Estados Unidos.

De nada sirve lamentarse por quien no estará. Lo vital es pensar en que los que estén, irán por la meta que motiva a este grupo de jugadores desde que se concentraron el 4 de julio en Rosario. Revalidar una medalla olímpica alcanza y sobra para dejar el alma en la cancha.

Lituania llegará golpeado porque estuvo palo y palo con España. Argentina no contará con todo su plantel. Será un duelo de elite más en estos Juegos Olímpicos. Un choque con olor a roce físico. A todo o nada.

La Generación Dorada está frente a un desafío exigente más en su historia.

Tuve la curiosidad de ir guardando el logo diario de google alusivo a cada día
de competencia y aquí está el resultado, ya todos pegados en dos cuadros.

Uhh la Isinbayeva. recuerdo de jovencito, casi niño, haberme enamorado de Yelena Davydova la gimnasta de aquellas olimpiadas, creo que fueron las de Moscú 80.

Sir Andros escribió:

Con vuestro permiso, a la que considero el símbolo de la representación de un país...

jaguarinside escribió:

Uhh la Isinbayeva. recuerdo de jovencito, casi niño, haberme enamorado de Yelena Davydova la gimnasta de aquellas olimpiadas, creo que fueron las de Moscú 80.

jaguarinside escribió:

Tuve la curiosidad de ir guardando el logo diario de google alusivo a cada día
de competencia y aquí está el resultado, ya todos pegados en dos cuadros.